sábado, 19 de octubre de 2013

Todo cambia muy rápido

Siempre pienso lo mismo: "Es como si estuviera de viaje de estudios, con una beca de duración indefinida con la que poder aprender en múltiples materias". Me repito esto una y otra vez, y se lo repito a todos los míos que anhelan verme de nuevo. "Pensar que he venido a formarme, cuando sea una crack en lo mío volveré,  y entonces, seré  yo la que podré decidir". No es malo tener estos pensamientos de vez en cuando, a una le ayudan a pasar el día a día.

Pero ahora, si echo la vista atrás, a una semana antes de venirnos aquí, mientras hacía las maletas y... ¡ay! Mientras hacía las maletas... ¡me lo quería llevar todo! Tenía en mente hasta meter la vajilla nueva, meter el túrmix... las sábanas... ¡¿en qué demonios estaba pensando?! No nos venimos de vacaciones, somos residentes. 
Obviamente, esta reflexión la hago ahora, cuando nuestra vida aquí va cogiendo forma. Cuando lo negro empieza a tornarse gris, y cuando podemos empezar a oler la meta tras nuestro comienzo no tan lejano.  

En este momento la cuenta atrás ya no es tan amarga. Y no quiero provocar caras de decepción en nadie, en vosotros, todos, los nuestros. Eso sí que no. Estamos bien, alegraros. Juntos estamos consiguiendo muchas cosas en muy poco tiempo. Porque tú y yo somos un equipo. Y aunque durante mucho tiempo hemos jugado en ligas diferentes, poco a poco he ido cogiendo ventaja hasta llegar aquí. Inconscientemente esto dibuja una sonrisa en mi cara.

El progreso de cada uno consiste en renovarse. “Renovarse o morir”. Para poder renovarse hay que morir en las viejas maneras de pensar y en las viejas formas de actuar, porque sólo de este modo nos garantizamos el poder mejorar y alcanzar los objetivos de nuestra vida. Pero ¡ojo! Todos los cambios son difíciles, son duros. Por naturaleza el ser humano huye de lo desconocido, e independientemente de la trascendencia de este cambio, suele aferrarse con fuerza aquello que tiene establecido como patrón dentro de la normalidad.

Hace un tiempo, yo decidí renovarme. Y espero que por poco jugo que saque a toda esta experiencia, vuelva a Cambrils con un nivel de inglés que ni por asomo hubiera conseguido si me hubiera quedado allí. Esto, conjuntamente con mejorar mi carrera profesional, se convertiría en el súmmum de toda esta aventura. No pido más.  

Feliz comienzo de fin de semana, aquí el sábado justo acaba de despertar.

¡¡C'mon!!

No hay comentarios:

Publicar un comentario